martes, 28 de diciembre de 2010

Los orígenes celtas

Representación celta del árbol de la vida.
Como curiosidad, apreciad la clave de Sol en el centro de las raíces.



Hola a tod@s,

antes de nada quiero avisar de que lo que voy a escribir a continuación, a pesar de ser 28 de diciembre, ni se trata de una inocentada, ni tampoco de ningún apoyo a ninguna postura nacionalista de esas que están tan de moda hoy por hoy y que, en su mayoría, no comparto.

Hay un señor con corbata, llamado Bryan Sykes, que es catedrático de genética en la Universidad de Oxford. Pues bien, este señor ha realizado durante los últimos años un estudio científico basándose en el análisis de ADN de diez mil individuos de las consideradas naciones celtas.

Estos resultados arrojan una nueva luz con respecto a los orígenes de la cultura celta. La teoría es la siguiente.
Según dichos análisis de la cadena de ADN, volviendo sobre las huellas de los halogrupos y del cromosoma Y, se llega a la conclusión de que el lugar de procedencia de todo el ADN celta es el noroeste de Iberia, es decir, la actual Galicia, Asturias y el norte de Portugal.

Por lo visto, en el mundo científico, esta teoría ha sido considerada como absolutamente válida y fiable.
Así pues, se desmonta completamente la teoría aprendida por todos y vigente hasta hace muy poco de que los celtas de Galicia procedían de las islas del norte.

Resulta que es justo al revés. La teoría apunta a la alta posibilidad de que los celtas y su cultura fueran un pueblo autóctono del noroeste de la península y, por otro lado, confirma plenamente que fue desde dicho lugar desde donde se expande hacia el norte desde hace unos cuatro mil años.

Todo ello viene, así mismo, contrastado también por hallazgos arqueológicos de los últimos diez años que concluyen que los celtas del noroeste de Iberia son los más antiguos que se conocen.

Además, se da verosimilitud a los escritos del siglo XI, que apuntaban que Irlanda había sido conquistada por pueblos celtas provenientes de Iberia, comandados por los hijos del rey Breogán, y que hasta ahora eran considerados como leyenda. Qué pensarán de esto los irlandeses, escoceses, galeses....??

Pues bien, todo esto viene a decirnos que deberíamos hacer lo posible para conocer nuestra cultura más ancestral y poder así conservarla en la medida de lo posible. No confundir esto con posturas nacionalistas muy actuales que considero faltas de mucho sentido.

A su vez, todo ello implica que la música celta procede de nuestra tierra, lo cual era algo que parecía más evidente bajo mi punto de vista, ya que creo que siempre se ha conservado en un estado de pureza más evidente que la música del norte de las islas.

Es bueno conocer realidades acerca de las raíces de un pueblo, comprenderlas, respetarlas y conservarlas como cultura que es, aunque tampoco hay que quedarse ahí y tampoco hay que obviar las influencias recibidas de otros lados, porque eso es lo que se conoce como evolución y no es bueno renegar de ella.

Al final va a ser verdad eso de que hay un gallego en la luna.

Aunque seguramente estará en la cara oculta, ya que los gallego somos reservados.

Y dicho esto, ¿tendrá el álbum de Pink Floyd "The Dark Side of the Moon" alguna referencia a los gallegos que allí habitan?. De hecho, el Señor Bryan Sykes prepara ya su exposición de la teoría, complementada con los datos que indican que el origen del reino unido es Celta y no centroeuropeo como se pensaba.

Siendo así, ¿serán los propios Pink Floyd la mejor banda de rock gallego de la historia?... jajjaj...

Ahí te dejo esa pregunta Mr. Roger Waters...



He dicho.

miércoles, 22 de diciembre de 2010

Las músicas del alma

Llegan de ninguna parte. De lo más lejano dentro de uno mismo. Abrigan sensaciones de frío y soledad, o abren la puerta para mostrar al mundo tu alegría. Y hacen que puedas expresar hasta lo más doloroso de la forma más fácil.

Músicas que llegan a tu cabeza y rondan durante días mientras inconscientemente vas dándoles forma, seguramente desvirtuándolas, pero es que son imposibles de tocar sin pulir.

A veces compones y te acercas mucho hasta esa música salvaje que un día empezó a surgir de alguna parte, pero rara vez te das cuenta de cuándo lo consigues. Lo consigues cuando llegas a tocar el alma de quien la escucha, pero no es fácil saberlo, poca gente deja entrever sus sensaciones.

Y normalmente cuando alguien te lo dice o te lo agradece tú no te lo crees. Por que para ti no vale. Porque tú tienes esa música en tu mente de otra forma y bajo tu propio punto de vista nunca llegas a aproximarte a esa perfección deseada.

Dicen que la búsqueda de la perfección es la base de la creación y de la evolución de las cosas.
Pero esa búsqueda resulta muy angustiosa, muy frustrante por momentos.
La tienes ahí, perfectamente clara en tu cabeza, resuena una y otra vez. Pero tus dedos y sobre todo tu razón no responden a lo deseado.

Porque es la razón la que siempre busca la norma, y en la norma todo se diluye y lo especial se desvanece.

Ahí es donde reside la genialidad. Genios son aquellos capaces de retar a la norma, aquellos que se escapan, los que la burlan. Y esa huída es la que les hace quedarse más cerca de lo salvaje y lo verdadero.

Aunque quizás somos todos lo demás los que huimos. Huimos hacia la norma, porque nos da seguridad y comodidad, porque somos cobardes para quedarnos en el estado natural de nuestra música y nuestras sensaciones.

Por eso algunos sufrimos de una terrible envidia sana cuando vemos a ciertos músicos, guitarristas en mi caso, que además de virtuosos por su dedicación, consiguen niveles de creatividad y de frescura casi insultantes.

Pero es curioso como, aún sabiendo que nunca vas a llegar a eso, el simple hecho de escucharlo te libera y hace volar tu imaginación y te da pié para seguir la búsqueda. Y te levantas de tu sillón y coges la guitarra e intentas entonar cosillas.

Pensaba en todas estas cosas escuchando "Cuerdas del alma", el nuevo disco de Juan Manuel Cañizares, en mi opinión uno de los mejores guitarristas que la música nos ha regalado.

Valentía es la palabra, por eso es quien es. Valentía para enfrentarse a la norma y no dejarse engatusar por ella. Y sin perder ni un ápice de la raíz, pero haciendo ver que las raíces crecen con el tiempo y que van invadiendo nuevas tierras fértiles en las que alimentarse.

Por todo ello, por abrir caminos, por compartir tu verdad y demostrarnos la ausencia de límites, es un placer escucharte Cañi.

Gracias maestro.

He dicho.



Juan Manuel Cañizares



miércoles, 15 de diciembre de 2010

Por Seguiriyas

Anteayer se nos fue un genio, un artista enorme, un gran tipo, de esos que engrandecen el arte, de los que hacen que sueñes con dedicar la vida a este mundillo tan difícil. Enrique Morente nos ha dejado muy temprano. Dice mi amigo Aníbal que se nos fue de gira... Pues que gran cartel en ese espectáculo... Morente se une a Camarón, Chocolate, Farruco, Carmen Amaya, Sabicas, Niño Ricardo, Caracol y muchos más... Ese espectáculo solo se paga con la vida.

No he sido yo muy "morentero", aunque me ha llegado mucho y siempre he reconocido en él una genialidad sin límites, basada en su grandísimo conocimiento del cante y en su valentía, esa valentía de entender el flamenco como una música abierta y viva, esa valentía por encima de opiniones de quienes opinan demasiado y sin criterio.

Recuerdo que llevaba yo una temporada ya dedicado a profundizar en el flamenco y la gente que me rodeaba entonces me hablaba de Morente. Conseguí algunas grabaciones y no llegué a entender su peculiar manera de hacer las cosas, aunque sí que veía que era especial. Evidentemente no estaba preparado para valorarlo en su medida.

Tiempo después vi por primera vez la película Flamenco de Carlos Saura, y fue ahí donde sentí por primera vez la grandeza de Morente.

Acompañado del también increíble Cañizares, se marcan una Seguiriya absolutamente hiriente. Completamente fuera de los cánones, demostrando conocer esos cánones tan afondo, que habían tenido ambos la necesidad de romperlos y abrir otro camino.

Esa seguiriya me arañó. Adoro esa seguiriya de Morente. No me la puedo quitar de la cabeza.

Hace unos días tuve la imperiosa necesidad de tocar por seguiriyas una tarde. No sé por qué, se despertó esa necesidad en mi.
Y esa misma tarde empecé a componer una Seguiriya. Han ido pasando los días y la voy completando.

No sé si el destino juega con uno a su antojo, el caso es que echando la vista unos días atrás me doy cuenta de que ese mismo día que yo empecé mi Seguiriya, Enrique Morente fue ingresado, sin yo saberlo, en la clínica en la que se apagó hace dos días.

Su seguiriya me hizo entenderle. Quizás el destino ha puesto en mis dedos mi propia seguiriya en este preciso momento para darle las gracias.

Gracias por todo lo que nos has dado y lo que nos seguirás dando a partir de ahora.

Sigues aquí Enrique Morente.

He dicho.



Enrique Morente y Juan Manuel Cañizares